Modelo cognitivista
Se trata de un
modelo basado en el aprendizaje significativo, que es, según expone Zayra
Méndez en Aprendizaje y cognición, un
proceso por medio del que se relaciona nueva información con algún aspecto ya
existente en la estructura cognitiva de un individuo y que sea relevante para
el material que se intenta aprender.
Este modelo persigue el
conocimiento con el fin de poder aplicar la información aprendida a distintos
casos, siendo esta la preocupación principal del docente, es decir, este se
preocupa por las capacidades individuales de los alumnos.
Por lo tanto, se basa en las
cualidades del saber ser para saber transferir.
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Podemos decir,
tras lo antes expuesto, que el objetivo principal de este modelo es crear una
capacidad de “autogeneración” de conocimientos que esté en continuo
crecimiento, es decir, se le dan una serie de elementos al alumno y deberá
construir su propio conocimiento a partir de estos (constructivismo),
entendiendo por qué se relacionan y cómo.
Por esto, para
conseguir el objetivo, la actitud del discente es muy importante, ya que para
que se de esta forma de enseñanza debe mostrar un interés y voluntad activa por
aquello que se va a aprender, lo que resulta un gran inconveniente, debido a
que no todos tienen las mismas inquietudes y capacidades.
La evaluación de este modelo se
lleva a cabo a través de una “prueba” que consiste en aplicar los conocimientos
adquiridos a un caso diferente del que se conoce.
Este modelo
tiene su base en el contexto en el que se da el proceso de enseñanza-
aprendizaje y se enfoca a la transformación del entorno social del grupo y el
crecimiento individual de los discentes para que esta transformación sea
eficaz.
Los contenidos
que enseña este modelo suelen ser temas transversales, es decir, temas enfocados
a situaciones problemáticas y retos sociales del contexto en el que los
discentes se encuentran.
Estas situaciones o retos
(necesidades) son el punto clave del modelo, ya que a partir de ellas el
docente crea una conciencia de compromiso con estas necesidades y provoca el
cambio o la transformación, por ello podemos decir que este modelo tiene una
gran carga ideológica y es muy usado para manipular a las personas, ya que guía
la información para que aprendas a pensar por ti mismo pero a la vez te sumerge
en la ideología que se defiende sobre ese contexto.
La
comunicación entre docente-discente es de carácter multidireccional, ya que en
el proceso de comunicación actúan más de tres personas, interaccionando todas
entre ellas (alumno-profesor; profesor-alumno; alumno-alumno), es decir se crea
un debate en el que todos participan respondiéndose a ellos mismos las dudas y
dando sus opiniones, ya sean positivas o negativas. Observando este se puede
decir que sigue una metodología grupal.
Para acabar, podemos decir, que
al igual que el anterior persigue el saber
ser para saber transferir.
Según mi punto
de vista, este modelo es muy eficaz ya que te enseña a tener tus propios
pensamientos y elegir que quieres aprender, pero por otro lado está muy
influenciado por las ideas de aquel que transmite el conocimiento, pudiendo
llegar a confundir las propias ideas (las nuestras) manipulándonos al implantar
las suyas.
Ambos modelos
aquí descritos pertenecen al paradigma sociocrítico, el cual es una fusión del
cualitativo y el positivista.
Este paradigma defiende que
existe un término intermedio entre los dos antes citados, buscando la relación
entre las características sociales o el entorno con la educación para conseguir
así la igualdad de oportunidades entre los discentes.





